El lema de este año, además de recordarnos esta bonita exigencia de nuestra vocación, nos habla también de la eucaristía. Porque el banquete al que Jesús nos está invitando no es solo el cielo, al que queremos llegar cuando nos toque y en el que queremos encontrarnos con todos los hombres y mujeres que le han amado.
Ese banquete se hace presente ya, también, en nuestra vida mortal, en nuestro mundo actual. El Señor quiere invitar a todos a participar del banquete de la eucaristía, en el que Él mismo se nos da como alimento, como manjar, como viático para la vida eterna.
Qué bonito es lo que hemos
experimentado todos: ver la ilusión,
el entusiasmo, la cara de sorpresa
de los niños que reciben por primera
vez la comunión.
Esa misma ilusión, esa misma
inquietud la tienen los hombres y
mujeres que se encuentran con Cristo
Eucaristía por primera vez, y
descubren, con asombro, que Dios
mismo se les da en esa comunión como
alimento.
Los misioneros están invitando a todos con los que se encuentran a entrar en el banquete en el que Cristo renueva su sacrificio salvador, y así abren las puertas del cielo para que todos ellos entren en el banquete que nunca acaba, en la fiesta para la que todos nosotros fuimos creados y pensados por Dios.
Siéntete enviado también tú
a esta preciosa misión de la
Iglesia, y apoya con tu oración, con
tu sacrificio ofrecido y con tu
donativo a que muchos hombres y
mujeres ¡entren en el banquete de
Dios!
En relación a las colectas
y donativos para la Campaña del
Domund, recordaros que
además de por transferencia o
ingreso directo en ntra. cta.
ctte., también podéis traerlas a
nuestras oficinas, sobre todo si
tenéis muchas monedas (traerlas contadas
por favor), dónde os expediremos
el recibo correspondiente. En este cartel
tenéis las cuentas donde podéis
realizar los ingresos. Tenedlo presente para que la colecta se
contabilice en OMP Zaragoza y no
vaya a parar al apartado de "otros
ingresos" en la contabilidad
general.